Vivir en la incertidumbre

Y de repente la vida cambio en un abrir y cerrar de ojos, toda nuestra rutina y lo que creíamos que nunca podía suceder ocurrió, un virus que vino a poner a todos de cabeza con una convulsión en la parte política, económica y social.

En este tiempo existe tanta incertidumbre y nos preguntamos: ¿Podremos mantener a nuestro lado a las personas a las que amamos? ¿Podremos mantener nuestro trabajo que con esfuerzo hemos construido? ¿Será que el gobierno está preparado para ayudarnos?

Siempre he visto la vida como una oportunidad y una bendición, pero creo que Dios nos cambio todas las preguntas y no existen por el momento las respuestas.

En este tiempo he aprendido a valorar más a mi familia, a ser más tolerante con mis hijas, a ser más creativa con la cocina y sobre todo a ser disciplinada con mi nueva forma de vida, llegan los momentos en donde los recuerdos comienzan a dar vida al corazón y de vez en cuando me alimento de ellos de los buenos momentos porque los tristes prefiero no recordar.

Ahora todos estamos aquí viviendo de diferente manera un cambio de vida repentino que no miró razas, riquezas, personas buenas o malas, estamos todos sumidos en un tiempo de incertidumbre, ahora todos necesitamos esperanza, esperemos que los medios de comunicación sean nuestros mejores aliados que nos permitan ser mejores seres humanos y nos ayuden a la construcción de una mejor sociedad.

Mantengamos la fe encendida a través de la esperanza que de vez en cuando desaparece.